Se trata del rapero BlackSteban, quien dejó atrás su pasado entre las armas para entregarse a la potencia de su voz y armonías de las guitarras.
"Fue una buena experiencia. Lo hicimos en las ciudades de Bogotá, Batú, Cartagena y Palenque de San Bacilio y participaron más de 70 personas; el equipo fue mixto entre gente de Buenos Aires y técnicos de allá. El video tiene una posproducción interesante ya que Francisco Borghini, amigo personal, le sumó sus ilustraciones que están cuadro por cuadro de forma manual", precisa Matías Mera, director del videoclip.