La propuesta del Gobierno nacional para una reforma previsional, que comenzaría a regir a partir de marzo del año próximo, prevé un ajuste semestral de las jubilaciones que se determinará a través de la aplicación de una fórmula proporcional conformada por la evolución de los salarios (50%) y la recaudación impositiva (50%) y excluye a la inflación como variable de ajuste.
Dicha fórmula tiene como antecedente directo la establecida por la Ley N° 26.417 que estuvo vigente desde 2008 hasta su derogación en 2017.
El proyecto será puesto a consideración de la Comisión Bicameral Mixta de Movilidad Previsional por el Poder Ejecutivo con el objetivo de que comience a regir en 2021. Para eso, dicha Comisión ya fue citada para este jueves con la intención de emitir dictamen. Su presidente, Marcelo Casaretto, del Frente de Todos, señaló a la agencia estatal de noticias Télam que los dictámenes se enviarán al presidente Alberto Fernández y a los titulares de de ambas cámaras legislativas: Cristina Fernández de Kirchner (Senado) y Sergio Massa (Diputados). Posteriormente, se convocará a las comisiones de Previsión Social y Presupuesto.
La futura movilidad jubilatoria
El proyecto es resultado de un trabajo conjunto que llevaron adelante los ministerios de Trabajo, Empleo y Seguridad Social y Economía y la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses).
La futura fórmula buscará reemplazar a la suspendida Ley 27.426 -sancionada durante el gobierno de Mauricio Macri- que ponía el eje en la evolución de la inflación, sin tener en cuenta la movilidad y los recursos disponibles.
En los dos años que tuvo vigencia la ley suspendida, el haber mínimo de los jubilados cayó un 19,5% en términos reales.
"La fórmula que se propone es sustancialmente la misma a la sancionada en el año 2008 y que resultó en una mejora sostenida en el poder adquisitivo de los jubilados y jubiladas hasta el año 2015", consideraron fuentes del Palacio de Hacienda.
El proyecto que se pondrá a consideración del Parlamento excluye a la inflación como método de ajuste porque "no es deseable en la Argentina", en virtud de la realidad que el país atraviesa "hace lustros" en materia inflacionaria, según se indicó.
La fórmula
"Una fórmula que incorpora a los salarios, implica que el ingreso de los pasivos acompañe al de los activos. La posición de la mayor parte de los especialistas es que la evolución de los salarios debe ser parte de la fórmula de movilidad", destacó el informe.
Asimismo, se indica que la inclusión de la recaudación impositiva en la fórmula "permite compartir el crecimiento y, al mismo tiempo, cuidar la sustentabilidad fiscal".
El Gobierno sostiene que el nuevo esquema "permitirá reducir el actual déficit previsional, dado que, si bien el salario real aumenta junto con el crecimiento económico, lo hace menos que los recursos tributarios".
La "preocupación" de la CGT sobre la reforma
El Consejo Directivo de la Confederación General del Trabajo (CGT) expresó su "preocupación" por la reforma jubilatoria en un comunicado con las conclusiones del encuentro que se celebró este martes en la sede de la calle Azopardo 802.
En este sentido, los dirigentes sindicales reclamaron, entre otras cosas, que se garantice que el cambio de fórmula de actualización jubilatoria "no perjudique a los beneficiarios del sistema previsional argentino".
Los dirigentes sostuvieron que "el esfuerzo compartido entre el Estado, los trabajadores, los jubilados, los beneficiarios de planes sociales y las empresas para transitar la pandemia, mantener el empleo y evitar la profundización de la desigualdad social no puede ni debe ser ahora dilapidado".
La CGT, que colideran Héctor Daer y Carlos Acuña, deliberó durante varias horas y puntualizó al término del encuentro que, entre todos, "se construyó una red de contención que evitó el colapso social en los momentos más críticos" del país.
