Matices y contradicciones en las políticas para frenar la violencia machista
INFOnews se pregunta cómo gestiona el gobierno de Cambiemos las políticas de género. Opinan una periodista, una antropóloga feminista y una representante de la sociedad civil.
El primer #NiUnaMenos surgió durante el gobierno de Cristina Kirchner. La segunda marcha nacional llegaría con el presidente Mauricio Macri en el poder. El reclamo de miles de mujeres contra los femicidios y la violencia machista es una de las consignas que sobrevivió al cambio de Gobierno. Y Macri pareció entender el mensaje popular que se canalizó, en gran parte, a través de las redes sociales.
Semanas atrás, el mandatario presentó el "Plan Nacional de Acción para la Prevención, Asistencia y Erradicación de la Violencia contra las mujeres 2017-2019". La presentación del plan viene a saldar una deuda que el Poder Ejecutivo tenía desde 2010, cuando la Ley 26.485 de Protección Integral a las Mujeres, se reglamentó. El plan incluye la construcción de una red de 36 hogares integrales en distintos puntos del país, el uso de tobilleras electrónicas con sistema de geolocalización para monitorear a los agresores y una aplicación para teléfonos celulares para pedir ayuda inmediata. También habrá líneas de microcréditos para víctimas, se modificarán las currículas educativas desde el nivel inicial hasta la secundaria y se prevé la reglamentación de la ley de patrocinio jurídico gratuito para las mujeres víctimas.
Para Natalia Gherardi, directora ejecutiva del Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA) "tener un plan nacional de acción contra la violencia es un paso importante y positivo porque nos permite conocer las estrategias a mediano y largo plazo en el marco de las cuales se inscriben las acciones estatales" pero "el plan en sí mismo no es, ni puede ser, la solución a las violencias".
De acuerdo al análisis que Gherardi hizo en diálogo con este sitio "la violencia contra las mujeres está en la actual agenda" de la administración pública "pero ese es solo uno de los temas de la agenda por la igualdad de género. No todos encuentran la misma receptividad en el Estado. Hay diferencias importantes entre áreas y niveles de gobierno".
Contradicciones
Uno de los episodios más polémicos en cuestiones de género por parte del Gobierno, fue la designación del diputado Julián Dindart al frente de la Comisión Familia, Mujer, Niñez y Adolescencia de la Cámara Baja. El diputado correntino aseguró, en 2012 cuando se desempeñaba como ministro de Salud de Corrientes que "las adolescentes se embarazan porque tienen un recurso económico como premio por haber tenido un hijo". A fines de junio de este año, Dindart, volvió a insistir con el tema y luego intentó desalojar a periodistas y asesores de la sala en la que se desarrollaba la reunión. Días después, el polémico diputado presentaba su renuncia. Eduardo Amadeo, compañero de bloque de Dindart, aclaró que "su salida no está relacionada al escándalo" que provocaron sus polémicas declaraciones. "Dindart tiene algunos problemas personales y esta comisión exige mucho tiempo. El reemplazo estará dentro de Cambiemos y se definirá en las próximas 48 horas", indicó Amadeo.
Como señaló a INFOnews la periodista de Página/12 especializada en temas de género, Luciana Peker, los procesos políticos carecen de linealidades. Esos matices pueden verse en el modo en que la gestión de Mauricio Macri aborda los temas de género: por un lado se presentó el Plan de Acción contra la Violencia, reconocido como un hecho positivo y destacable. Mientras tanto se sucede el "desarticulamiento y vaciamiento del Programa de Salud Sexual y Procreación Responsable en el Ministerio de Salud de la Nación. Hay una desjerarquización de la política de Educación Sexual Integral dentro del Ministerio de Educación de la Nación. También hay una desjerarquización de la Dirección de la Mujer en la Ciudad de Buenos Aires", analizó Peker. Estos matices llevan a la periodista a la conclusión de que "no hay políticas de género transversales en todo el Gobierno".
Si bien Peker destacó que "el Plan de Acción contra la Violencia presentado en Casa Rosada y llevado adelante por Fabiana Tuñez -presidenta del Consejo Nacional de la Mujer- es un muy buen plan, que puede salvar vidas y ayudar a las mujeres" y debe ser apoyado, también apuntó una serie de decisiones tomadas por el Gobierno de Cambiemos que han sido repudiadas desde el movimiento de mujeres.
Según información que provee la Secretaría de Hacienda del actual gobierno, en los primeros seis meses de este año, el Ministerio de Salud de la Nación solamente ejecutó el 1,5 por ciento del presupuesto del Programa de Salud Sexual y Procreación Responsable que depende del Ministerio de Salud de la Nación. El programa tiene por objetivos prevenir embarazos no deseados, promover la salud sexual de las y los adolescentes. Y contribuir a la prevención y detección precoz de enfermedades de transmisión sexual, VIH/sida y patologías genitales y mamarias.
Organizaciones de sociedad civil y el movimiento de mujeres de todo el país expresaron su preocupación por la situación de precariedad laboral en la que se encuentran los trabajadores del Programa Nacional de Educación Sexual Integral, que depende del Ministerio de Educación a cargo de Esteban Bullrich. Este programa también atraviesa un proceso de "desjerarquización", como señala Peker. Sucede que el ministerio despidió a cinco empleados del Programa que funciona con un plantel de quince personas. Debido a las quejas y reclamos, el Ministerio de Educación postergó los despidos por sesenta días. Pero no se sabe qué sucederá con un área clave para prevenir la violencia de género.
En la Ciudad de Buenos Aires, la situación de la Dirección de la Mujer también es compleja. Creada hace 26 años y pionera en la atención a las Mujeres Víctimas de Violencia Familiar, hoy tiene como presupuesto unos 85 millones de pesos, apenas el 0,07% del total del presupuesto de la Ciudad de Buenos Aires. Además, de las 500 trabajadoras con las que contaba en 2007 permanecen sólo 280 y posee serios problemas de infraestructura y mantenimiento en muchos de los centros integrales y hogares funcionan en locales obsoletos, con carencias edilicias visibles.
Patrocinio jurídico gratuito
El 23 de marzo, en el Centro Metropolitano de Diseño (CMD) de Barracas, Michelle Obama dio un discurso destinado a estudiantes en el que resaltó el movimiento #NiUnaMenos. La primera dama estadounidense también destacó que luego de la convocatoria del 3 de junio se aprobara la Ley de patrocinio jurídico gratuito para víctimas de violencia de género. Sin embargo, la norma no se está aplicando.
"Es una ley fundamental porque va a permitir a las mujeres hacer juicios por alimentos, que se puedan defender, que puedan seguir las querellas cuando hay violencias y cometieron delito. Lo que dice el Ministerio de Justicia es que no hay fondos. Lo que dice ahora el Plan de Acción contra la Violencia es que se va a regular", precisó la periodista especializada en género, Luciana Peker.
En relación a esta norma, Natalia Gherardi, del Equipo Latinoamericano de Justicia y Género apuntó que "es una ley que se votó en 2015 sin partida presupuestaria de modo que será importante monitorear el presupuesto que se solicite y se logre para el próximo año".
Deborah Daich, del Colectiva de Antropólogas Feministas (CAF) de la facultad de Filosofía de UBA, también dio su mirada sobre cómo se gestionan las políticas de gobierno en temas de género y violencia. "Si algo ha hecho la gestión Cambiemos en estos últimos meses es atentar cotidianamente contra los derechos básicos de las mujeres, en especial, de las pobres, resintiendo sus posibilidades de acceso a la salud, la justicia, la vivienda, la educación y el trabajo. Las medidas de gobierno de los últimos meses (ajuste, endeudamiento, devaluación, inflación, despidos, tarifazo) marcan el regreso de las políticas neoliberales y anuncian una feroz feminización de la pobreza" aseguró a Infonews.