El Estado Islámico (EI) reivindicó este jueves el asesinato de seis trabajadores humanitarios franceses y dos nigerinos, cometidos el 9 de agosto pasado en Níger.
Mediante un comunicado en su revista al-Naba, considerada fidedigna por varias fuentes, entre ellas el sitio de vigilancia antiyihadista estadounidense Site, el EI explicó que el "fulminante ataque" en la región de Kouré provocó la muerte de seis "cruzados" franceses y dos "apóstatas" nigerinos.
Los jóvenes humanitarios franceses, dos hombres y cuatro mujeres, habían sido asesinados con su chofer y su guía nigerinos por hombres armados a bordo de una moto cuando visitaban la reserva de jirafas de Kouré, a 60 km al sureste de la capital Niamey, donde tenían su base.
Tras el ataque, el gobierno nigerino cerró la reserva, mientras que Francia definía todo Níger como "zona roja" para sus ciudadanos, excepto la capital, según detalló la agencia de noticias AFP.
Actualmente, los grupos islamistas (algunos vinculados con Al Qaeda y otros con el EI) se mantienen activos en el oeste de Níger, una zona cercana a la frontera con Malí y con Burkina Faso.
