Brooke Shields tenía solo 14 años cuando protagonizó la muy recordada película "La laguna azul" (The Blue Lagoon, de Randal Kleiser, 1980). Allí, la entonces adolescente participó de escenas en las que fue notoriamente sexualizada por la producción del film, algo que en ese momento no era cuestionado pero hoy, luego de cuatro décadas y mucha agua pasada bajo el puente de la industria del espectáculo, es impracticable y genera debates sobre los límites del morbo y la necesidad de frenar la manipulación de menores de edad.
Luego del éxito del film la pequeña Brooke fue fichada por Calvin Klein y su imagen volvió a explotarse como ícono sexual para la venta de jeans y con un slogan que en la actualidad genera escalofríos: "¿Querés saber qué hay entre mis Calvins y yo? Nada."
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— Oir Mortales (@oirmortales) February 10, 2022
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“Era una niña ingenua, vivía en una burbuja no pensé que tuviera naturaleza sexual. Si había la intención de usar el doble sentido, no me lo explicaron", relató a revista Vogue sobre aquellos años.
Hoy, a los 56 años, la actriz y modelo vuelve a ser imagen de una marca de ropa, más puntualmente de jeans de la marca Jordache, pero adulta y consciente de lo que firma así como del uso de su imagen.
"Las mujeres ya son dueñas de la sexualidad que quieren proyectar”, dice Brooke Shields hoy.
Entre otros puntos que incluyó su contrato, la artista exigió a la marca de ropa que su imagen no fuera pasada por los filtros de Photoshop.
Según explicó Shields durante una entrevista con la revista People, ella aprecia que Jordache “celebre la idea de ser sexy y audaz", ya que, dijo, la marca "siempre ha presentado mujeres fuertes, trabajadoras y ambiciosas en sus campañas”.
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“Sabía que esto no sería explotación. Hay algo acerca de ser dueña de tu sexualidad a esta edad. No es un empoderamiento enojado", dijo y aclaró que "pone el foco en la fuerza femenina”.
“Hay un conocimiento que viene con la edad, y esto se siente menos como un trabajo y más como un privilegio”, acotó en relación a las fotos, algunas de las cuales compartió en su cuenta de Instagram.
“A mis 56 años puedo volver atrás y mirar la cámara y decir: es verdad, están haciendo zoom primero a mis genitales y luego suben hasta mi cara. Pero el sexo ha vendido desde el principio de los tiempos. En cada portada en la que he aparecido, tanto si tenía 15 años como cualquier edad, siempre hay algo en la mirada”, señaló.
Sobre la iconografía que representó en los años 80s fue clara: "Era virgen, fui virgen para siempre después de aquello. Siempre pensé que era la virgen más famosa y celebrada del mundo”.
