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Grieta: Italia aprueba confinamientos y España los repudia

Más del 75% de de los ciudadanos en Italia aprueban los confinamientos por el covid-19. En cambio, en España se resiste a las medidas.

(Redes)
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Llegó el invierno al hemisferio norte y con el una grieta inesperada. El 76 por ciento de la ciudadanía en Italia se declaró a favor de ulteriores medidas de prevención del covid-19 para salvar las fiestas navideñas, según un sondeo realizado por el portal Adnkronos y la agencia sociológica Emg/Acqua. Al tiempo que en España, las nuevas medidas fueron masivamente rechazadas.

El 76 por ciento de los encuestados se declara "favorable a mayores sacrificios ahora para salvar la Navidad y poder pasar las festividades en familia", mientras tan solo el 12 por ciento es contrario, emerge del sondeo, publicado este martes, citado por Agencia Sputnik.

Según los datos recogidos durante la encuesta, la tasa de aprobación es más alta entre los mayores de 55 años, con un 91 por ciento de respuestas afirmativas, mientras entre los jóvenes el "sí" alcanza tan solo el 53 por ciento de adhesiones.

En cuanto a la repartición geográfica, son los habitantes de las islas de Sicilia y Cerdeña, así como de las regiones del centro del país, los que están más dispuestos a aceptar nuevas medidas restrictivas (87 y 85 por ciento respectivamente), en tanto que la cuota más baja (66 por ciento) se registra en las regiones nororientales de Italia.

 <p>Grieta: Italia aprueba confinamientos y España los repudia</p>
Grieta: Italia aprueba confinamientos y España los repudia

Según los medios italianos, el Gobierno está preparando nuevas restricciones para contener la difusión del coronavirus, como el toque de queda entre las 22:00 y las 5:00 y el confinamiento en los territorios más afectados.

Por su parte, España sigue cerrando la puerta a la posibilidad de decretar confinamientos domiciliarios pese a que algunas autoridades regionales ya piden al Gobierno sumarse a la ola de restricciones que se extiende por gran parte de Europa.

"Necesitamos medidas contundentes para frenar la expansión del virus pero siempre desde la prudencia y la cautela", dijo este viernes la portavoz del Gobierno, María Jesús Montero.

La portavoz gubernamental pronunció estas palabras tras la reunión semanal del Consejo de Ministros, en la que se aprobó finalmente la prórroga del estado de alarma autorizada el jueves por el Congreso de los Diputados.

ALARMA SIN CONFINAMIENTO

El estado de alarma expirará el 9 de mayo y al contrario que en el pasado mes de marzo, esta herramienta de excepción no establece el confinamiento de los ciudadanos en sus casas.

Esta vez la estrategia del Gobierno se basa en aplicar toques de queda nocturnos y en otorgar a las distintas comunidades autónomas más capacidad para adoptar sus propias medidas.

Esto llevó a que 14 de las 17 regiones del país anunciaran confinamientos perimetrales para restringir movimientos no necesarios, lo que se suma a una larga lista de medidas para limitar reuniones sociales y los aforos en bares, restaurantes o establecimientos comerciales.

Sin embargo, el estado de alarma ni siquiera contempla la posibilidad de confinar a los ciudadanos, lo que hace que el plan del Gobierno para los próximos seis meses empiece a presentar grietas menos de una semana después de ser avalado por el Congreso

"La herramienta no permite el confinamiento domiciliario pero estamos seguros de que si se actúa con estas herramientas, se conseguirá doblegar la curva, estabilizarla y mantenerla baja", afirmó el Ministro de Sanidad, Salvador Illa, en la tarde del viernes.

Este lunes la comunidad autónoma de Asturias solicitó formalmente al Gobierno sobrepasar los parámetros de la alarma para poder imponer confinamientos.

Aunque no formalmente, este martes también se sumó la región de Castilla y León, que pide más herramientas para luchar contra el virus.

"Reclamamos al Gobierno de España que asuma su responsabilidad y decrete las medidas de excepción que la excepcional situación requiere", dijo el presidente de Castilla y León.

MONCLOA PIDE TIEMPO

La respuesta del Gobierno central ante estas peticiones insiste en que todavía es pronto para valorar el impacto del estado de alarma, que se empezó a aplicar hace menos de diez días.

"Cuando uno toma medidas se tarda entre 10 y 15 días en ver los resultados. Por lo tanto, debemos tener un punto de templanza y saber esperar el tiempo necesario para poder ver los efectos de unas medidas muy drásticas y no entrar en una especie de competición para ver quién toma la medida más dura", respondió el Ministro de Sanidad.

En este rechazo a los confinamientos el Gobierno de España encontró un extraño compañero de viaje: la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz-Ayuso, que lleva meses protagonizando episodios de enfrentamiento con el Palacio de la Moncloa.

"Para Madrid esa es la última solución. Tenemos que darlo todo, trabajar sin descanso para que el confinamiento general sea algo impensable", dijo la dirigente de la región capitalina.

Del mismo modo, las autoridades del País Vasco manifestaron este martes su rechazo a la posibilidad de un nuevo confinamiento, lo que refleja la ausencia de una postura común entre las distintas regiones del país sobre si se deben adoptar medidas más estrictas.

¿EN DIRECCIÓN CONTRARIA A EUROPA?

Mientras tanto, los datos no dan motivos para el optimismo en el corto plazo. España sumó el lunes 55.019 nuevos casos de covid-19, estableciendo un nuevo récord de contagios en un fin de semana desde el inicio de la pandemia.

En adición, este martes el Ministerio de Sanidad reportó 18.669 casos y 239 fallecidos nuevos que elevan a 1.259.336 millones el total de contagios, con 36.495 víctimas mortales.

La incidencia acumulada durante los últimos 14 días ya se encuentra en los 527 casos por cada 100.000 habitantes.

Algunos países europeos (como Reino Unido o Irlanda) adoptaron medidas de confinamiento domiciliario o de cierre completo de la hostelería (como Alemania) antes de llegar a una situación tan deteriorada.

Portugal anunció este sábado el confinamiento del 70 por ciento de su población, recluyendo a los ciudadanos de los municipios con más de 240 casos por 100.000 habitantes en los últimos 14 días, algo que incluye a importantes ciudades como Lisboa y Oporto.

El principal portavoz del Ministerio de Sanidad durante la pandemia, Fernando Simón, valoró que la situación de España es "mala", pero no entre las peores de la Unión Europea.

"Ahora mismo España a nivel de la Unión Europa ocupa el número 16 a nivel de incidencia acumulada en los últimos catorce días por 100.000 habitantes, aunque estar en 527 casos es estar muy lejos de los valores aceptables", reflexionó Simón.

Pese a ello, tanto las voces internas que piden medidas más estrictas, como la sombra de los confinamientos en países vecinos, instalaron ya el debate del confinamiento en España.

Aunque la reacción inicial del Gobierno es intentar evitarlo, el propio Fernando Simón admitió este martes que en el largo plazo "no se puede descartar ninguna medida para hacer frente al coronavirus".



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