El legislador porteño del Frente de Izquierda (FIT), Gabriel Solano, presentó un proyecto de ley por la separación de la Iglesia del Estado porteño. El texto plantea terminar con las eximiciones impositivas con el que cuentan las propiedades religiosas según el código fiscal, anular las cesiones de tierras e inmuebles y eliminar los subsidios que reciben las entidades religiosas.
"Con las 612 instituciones religiosas y educativas que están exentas de pagar ABL, la Iglesia se ahorra $400 millones anuales lo que representa un 5% del ingreso total de ABL que tiene la Ciudad mientras que los trabajadores sufren aumentos de este impuesto que confisca su salario. A esto se le suman las exenciones impositivas, y las propiedades de uso privado como garajes y hasta el propio Luna Park", denunció el edil del Partido Obrero (PO).
"Estos beneficios económicos dan cuenta que en la Ciudad de Buenos Aires tenemos un Estado confesional. La manifestación más evidente de esto ocurre en materia educativa, donde casi la mitad de la matrícula estudiantil está en la educación privada-confesional", describió y apuntó contra el resto del arco político: "Esta política fue aplicada por todas las fuerzas políticas que gobernaron la Ciudad, desde la centroizquierda ibarrista hasta el macrismo, pasando por el kirchnerismo".
Para el PO, los beneficios económicos que cede el Estado porteño "ascienden a sumas millonarias, todos estos recursos son utilizados por el clero para ser un factor de bloqueo y contención de la lucha de las masas y a su vez para oponerse a la implementación de reivindicaciones elementales de las mujeres como lo demostraron contra el aborto legal, seguro y gratuito".
En la presentación oficial de la iniciativa, Solano invitó a la sociedad civil a impulsar una campaña por el tratamiento del proyecto en los colegios, hospitales y barrios porteños y apoyar la medida enviando mails a la comisión de Hacienda de la Legislatura ([email protected]) donde actualmente está el texto.