A dos días de que el oficial de la policía de la ciudad de Rojas Matías Ezequiel Martínez, de 25 años, asesinara a su ex novia Úrsula Bahillo de 30 puñaladas, el Estado parece tomar cartas en el asunto. Si bien accionó reprimiendo con Infantería y balazos de goma a lxs amiguxs de la chica que se acercaron hasta la comisaría local para expresar su dolor, pareciera que hay otros caminos posibles como intervenir la comisaría local y de la Mujer de esa ciudad, donde a la víctima no le tomaron la denuncia pese a su situación de riesgo de vida.
Sobre este desamparo en que el Estado deja a las personas víctimas de violencia machista, habló esta jornada la ministra de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual, Estela Díaz. "A Úrsula no se le ofreció nada. No se ponderó el riesgo. Estamos trabajando porque es mucho lo que tenemos que mejorar desde el Estado", admitió. La joven asesinada hizo más de diez denuncias por la violencia de Martínez -quien tenía prontuario de violento- , avisó a sus amigas, a su familia y hoy está muerta.
Rojas: marcha para pedir justicia por el femicidio de Úrsula
El femicida que pertenecía ala Comisaría 2ª de San Nicolás contaba con una licencia psiquiátrica desde septiembre pasado en el marco del juicio por "amenazas calificadas" contra otra ex pareja.
Además, la Fiscalía General del Departamento Judicial de Junín informó durante el martes que el 28 de enero, la madre de Úrsula había denunciado a Martínez por los delitos de amenaza y desobediencia, cuyo expediente era seguido por el fiscal Sergio Terrón, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 5 de Junín, el mismo que ahora tiene a su cargo la investigación por el femicidio. El 5 de febrero, tres días antes del crimen, se repitió la denuncia de la familia Bahillo, causa que quedó en manos de la UFI N° 3 de Junín. No obstante, el hombre siguió libre.
"La Fiscalía dijo que habló con el femicida y sólo le dijo que podía ser sancionado. Con todos los antecedentes que tenía", detalló Díaz en diálogo con el programa de radio Crónica Anunciada, que se emite por FM Futurock.
"Estamos muy conmovidas. Acá hubo pedido de ayuda y hoy estamos con este hecho lamentable, que nos interpela en las acciones del Estado", se hizo cargo la ministra desde el lugar que le toca como integrante del Gobierno bonaerense. "Viajamos del Ministerio, nos reunimos con la mamá, con el papá, yendo al Poder Judicial, a la comisaría y reconstruyendo lo que pasó, no se ponderó el altísimo riesgo que se corría", reconoció.
Díaz contó que desde el Ministerio de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual trabajan fuerte en que hay que poner el foco en los agresores. "Acá había antecedentes. Hubo denuncias, hubo pedido de ayuda y hubo un Estado que no llegó", advirtió.
"Vamos a tener una reunión con el Ministerio de Seguridad. No deberíamos estar hablando de este femicidio si se hubiesen usado los dispositivos que están a disposición", consideró y confirmó que Seguridad separó a los policías que participaron de la represión a quienes marcharon pidiendo justicia por Úrsula.
Por último, la funcionaria que hace poco más de un año se hizo cargo de una cartera nueva en la provincia opinó que esperar que se terminen los femicidios por la creación del Ministerio de la Mujer es una "mirada simplista", pero que puede entender, respetar el enojo y que la sociedad sepa: "Trabajamos para cambiarlo".
