Murió la elefanta Pelusa: “Este es el resultado del cautiverio de 50 años"
Hay bronca en las organizaciones ambientalistas y de derechos de los animales.
05 de junio de 2018 - 01:30
Murió la elefanta Pelusa: "Este es el resultado del cautiverio de 50 años"
¿Qué puede tener de atractivo ver un animal en cautiverio? ¿Cuánta violencia social puede concebirse para pretender conservar a un animal por 50 años en un espacio absolutamente reducido, similar al de colocar a un humano en una habitación y no dejarlo desarrollarse hasta la muerte? De eso se tratan los zoológicos urbanos.
El zoo de La Plata no escapa a esta desgracia, que hoy se manifiesta en la muerte, tras 50 años de cautiverio, de la elefanta Pelusa. Como manifiesta el video, el animal, apoyándose contra los alambres, porque una enfermedad, presuntamente surgida del estado eterno en cautiverio, le provocó una lesión que le impidió poder echarse a descansar durante dos años.
El animal permaneció de pie sin poder recostarse en todo este tiempo, hasta que en la noche del domingo se tumbó hasta fallecer este martes. El hecho pone nuevamente en debate lo criminal que es mantener animales salvajes en cautiverio. Pelusa estuvo presa, encerrada en su cautiverio en el zoológico platense durante los últimos 50 años. Tiene una enfermedad en sus patas traseras desde 2014. Casi como una burla al sentido común, el último parte de la Municipalidad de La Plata antes del fallecimiento del animal indica que el animal "no muestra signos de sufrimiento". Los integrantes del equipo técnico, formado por veterinarios del Jardín Zoológico y los especialistas del santuario de Brasil junto a la Fundación Franz Weber, consideraron que Pelusa "después de muchos años de sufrimiento por su enfermedad, es el momento en que menor dolor siente en sus patas". El director del santuario de Brasil, Scott Blais, aseguró que "este es el resultado del cautiverio: 50 años en este espacio que es completamente insuficiente ya que no permitió la estimulación física, psicológica ni emocional". "Es muy difícil luchar contra lo que genera el cautiverio", dijo. Blaise sostuvo que "el deseo egoísta de querer ver animales en un zoológico, es lo que causa situaciones como ésta y no sólo con elefantes, hay muchos animales sufriendo en cautiverio". Blaise sostuvo que "desde hace dos años no se podía recostar, lo que puede ser agotador para un elefante, causar más daño, más dolor porque no puede liberar la presión de sus patas". Añadió que "antes de ayer a la mañana nos avisaron que Pelusa se encontraba en el piso. Parecía que finalmente era momento para dejarla reposar. Nuestra esperanza era que solamente necesitara descansar, que pudiera tener seis, ocho, diez o doce horas para relajarse y recuperarse, y finalmente recuperar sus energías para pararse". "Lamentablemente, esto no fue en la dirección que deseábamos", agregó.
