El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, planteó la necesidad de "explicar, comunicar y deconstruir algunos mitos" en torno a la minería abierta, la cual es fuertemente cuestionada por movimientos ambientalistas debido a las atroces consecuencias que genera, y que, eufemismo mediante, se ha denominado "pasivo ambiental".
Las declaraciones de Kulfas se dieron en el marco de la apertura del Primer Encuentro de la Mesa Nacional sobre la Minería Abierta a la Comunidad (Memac), con el que se procura instalar un ámbito de debate que "permita despejar ciertas dudas" relacionadas tanto con los aspectos ambientales como los laborales, impositivos y de aporte al desarrollo económico y social.
"No concebimos en la Argentina una minería que se desentienda de las cuestiones ambientales", aseguró el ministro, que también negó el impacto ambiental de la exploración off shore en Mar Argentino, a pesar de las advertencias de la comunidad científica.
Al respecto, cuestionó ciertas protestas de grupos ambientalistas, y puntualizó que en las discusiones que se llevarán a cabo en los futuros encuentros de la Memac se rechazará "cualquier expresión de violencia".
El titular de Desarrollo Productivo aseguró que la minería "puede ofrecerle a la Argentina parte de las soluciones a los problemas que tiene", en función de que "estamos en una etapa bisagra y el mundo demanda cada vez más minerales, que necesita en el marco de la transición energética".
En ese sentido, señaló la importancia de la explotación de yacimientos de "litio, cobre y muchos minerales más que vale la pena enumerar".
"Chile tiene la misma cordillera que nosotros y el año pasado exportó veinte veces más recursos mineros que la Argentina; los invito a ver si en un plazo no muy largo podríamos exportar, no digo veinte veces más, pero por lo menos cinco o diez veces" más que los niveles actuales, planteó.
Por otra parte, instó a derribar lo que, a su criterio son "dos grandes mitos", como que "la minería no paga nada o tiene muy poca presión impositiva" y que "no se controla lo que se exporta", lo que daría lugar a maniobras de evasión o elusión tributaria.
En el mismo orden, advirtió que "cerca del 80% de la inversión minera queda en el país", por medio del pago de salarios y contratación de proveedores locales.