MUNDO | Calentamiento global | CAMBIO CLIMATICO | nieve | RENOS

Ni la tierra de Papá Noel se salvó del calentamiento global

La zona de Laponia, en Filandia, sufre las altas temperaturas de los últimos 50 años y se ve afectada la nieve, las lluvias y la vida de los renos del típico trineo que reparte los regalos a las niñeces.

La crisis climática llegó a Rovaniemi, en la región de Laponia, cerca del Círculo Polar Ártico. Es administrada por varios países escandinavos pero, la casa de Papá Noel está enclavada en la parte que gobierna Finlandia, es decir, donde la fantasía deja -durante todo el año- un millonario negocio turístico. 

“En los últimos sesenta años hemos visto los inviernos más cálidos registrados. Sobre todo se nota en el aumento de las mínimas diarias”, dijo con preocupación Mika Rantanen al diario digital español Newtral. 

Laponia es un área escasamente poblada, unos 180.000 habitantes en sus 100.366 km² (92.667 km² de tierra y 7.699 km² de agua), que se encuentra en la región más septentrional de Finlandia en el norte de Europa, ocupando el 40% de la superficie de Finlandia con tan solo el 3,6% de la población del país.  Es famosa por su vasta naturaleza subártica, los centros de esquí y los fenómenos naturales, incluidos el sol de medianoche y la aurora boreal.

Desde 1970, las temperaturas medias anuales en Laponia aumentaron llegando a los 25 grados y el año pasado la advertencia del Panel Finlandés del Cambio Climático fue tajante: "Si no cambia la evolución de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, las temperaturas en esta región a mediados de siglo podrían situarse entre 2 y 3,2ºC más que en la actualidad".

Consultado por el medio, Rubén Varela, físico experto en cambio climático de la Universidad de Vigo, explicó que la zona ártica es “especialmente sensible” al cambio climático. 

Uno de los procesos es el ice-albedo feedback, que significa que a medida que las temperaturas más cálidas derriten el hielo, la superficie tiene menos albedo, es decir, refleja menos radiación y absorbe más calor, lo que genera una retroalimentación que amplifica la señal del calentamiento global.

La tierra de Papa Noel, Rovaniemi es la zona con más riesgo de inundaciones en Finlandia.

SOMOS UNA COOPERATIVA

NOS AUTOGESTIONAMOS

VOS NOS FINANCIÁS

¿CÓMO?

>CLICK AQUÍ<

 

El cambio climático también afectará a las estaciones en las que nieva en Laponia y la cantidad de nieve. Ahora llega dos semanas más tarde que en 1970 y los lagos se hielan más tarde. . 

Por su parte, en otoño y principios de primavera se estima que la precipitación de nieve será más baja de lo normal por el aumento de temperatura en esas épocas.

¿SIN RENOS, SIN FIESTAS?

Los cambios en la cantidad de nieve no son inocuos. Según explica a Newtral.es Sirpa Rasmus, investigadora en el Centro Ártico de la Universidad de Laponia, tienen un gran impacto en las comunidades que viven en Laponia, en la ganadería y en el crecimiento de los pastos.

En la ciudad más importante de la Laponia Finlandesa empiezan las fiestas navideñas el 13 de diciembre, la noche más larga del año, aunque actualmente las decoraciones navideñas están ya presentes en Laponia a inicios de diciembre.

Es muy importante la fiesta del día de Lucía donde las mujeres recorren las calles con una vela cantando una canción que cuenta como Lucía vence a la oscuridad. 

 

SOMOS UNA COOPERATIVA

NOS AUTOGESTIONAMOS

VOS NOS FINANCIÁS

¿CÓMO?

>CLICK AQUÍ<

Cuando acaba esta tradición, se empieza con los villancicos que dan paso al resto de festejos: saunas de navidad, decoración de abetos, copiosas cenas navideñas, la apertura de los calendarios de navidad de chocolate, la lectura de la declaración de paz de navidad en Turku.

El otro enorme festejo de Laponia, cuya tradición es incluso anterior a la Navidad, es el solsticio de invierno; el Beiwe, la diosa de la fertilidad, la primavera, el Sol y la Cordura. Hablamos de la fiesta que celebran los lapones de Noruega en la noche más corta del año, a lo largo del solsticio de verano (o San Juan) siguiendo los pasos de una antigua leyenda que cuenta como la diosa Beiwe y su hija camina sobre huesos de reno en el cielo para que vuelvan a crecer las plantas en la tierra y proporcione pasto a los renos. De esta creencia ancestral nace el Festival de Beiwe.



Dejá tu comentario