SOCIEDAD | cáncer | tratamiento | uom

La UOM le negó el tratamiento a un delegado con cáncer

En una grave denuncia, un delegado con cáncer denunció que la obra social de la UOM le negó el tratamiento.

Su nombre es Agustín Colovos, conocido como “Piraña”. Uno de los delegados que más se destaca en la Regional Oeste de la CGT. Tiene mieloma, cáncer de médula ósea y la obra social de la UOM, gerenciada por los hermanos Olmos, no lo atiende.

Según consignó Radio Gráfica en su sitio web, en un video enviado este martes por la noche a “amigos y compañeros” Agustín Colovos denunció a la dirigencia de la Unión Obrera Mertalúrgica, tanto de la seccional Morón como del secretariado Nacional. Ayer empezó la quimioterapia en el Hospital El Cruce, en Florencio Varela, porque su obra social, según denuncia, le negó atención.

“Desde que me diagnostican la enfermedad hace tres meses no tuve nunca una respuesta de la seccional Morón. Me vi obligado a mandar dos cartas documento a la UOM Central, al secretariado nacional, contando mi situación y que corría riesgo mi vida. Y me agarró en el ojo la enfermedad, estoy a punto de perderlo por la falta de atención. Las cartas documento que llegan a la UOM ni siquiera son recibidas, las rechazan en la puerta”, explicó Colovos, que integra la Agupación José Ignacio Rucci, opositora a la conducción a cargo de Sergio Souto en Morón (hoy también director del área laboral de ese municipio).

En una grave denuncia, un delegado con cáncer denunció que la obra social de la UOM le negó el tratamiento.

“Yo tengo el orgullo más grande que puede tener un miltante obrero con conciencia de clase, que es ser elegido por mis compañeros como delegado gremial dentro de la planta. Representarlos con la patronal, con el estado y con el sindicato, y por eso tengo un profundo amor por la Unión Obrera Metalúrgica y por nuestro trabajo. El sindicato para mi es una honra, eso no quiere decir que los hombres que lo conduzcan estén a la altura de las circunstancias“, planteó “Piraña” y afirmó: “Esta es una lucha colectiva, como lo son los despidos y toda la lucha que damos en la fábrica. La enfermedad también. Los trabajadores no tenemos que perder la dignidad nunca, ni mendigarle a un dirigente sindical ni a un dirigente político por un remedio, es nuestro derecho“.

Contó finalmente que “unos compañeros, que no quieren que los nombre, me donaron la medicación porque de la obra social no vino nada. Yo estoy con un recurso de amparo y quiero decir que estas cajitas de remedios están en las estanterías de los laboratorios, esperando por miles como yo”.

La respuesta de Souto

Consultado por la Gráfica, el titular de la UOM Morón, Sergio Souto, planteó no tener conocimiento de la situación. “Agustín tiene mi teléfono y me podría haber llamado, tiene que venir a verme”, afirmó el dirigente. “Apenas vi el video me soprendió y me puse a disposición. También me comuniqué con el secretariado nacional, con Osvaldo Lobato (secretario de Asistencia Social) y Antonio Caló (secretario general).

Tras lo cual preguntamos ¿Qué piensa del gerenciamiento de la obra social? “Yo estoy en contra que los trabajadores no tengamos el control de nuestra salud”. Explicó que sólo dispone de 300 mil pesos por mes para resolver problemas de afiliados que no atiende la Obra Social.

Image 26.jpg

Gerenciamiento de los hermanos Olmos

“OSUOMRA brinda un servicio de excelencia que ya beneficia a más de 350.000 afiliados con la máxima calidad que se refleja en la amplia disponibilidad de centros asistenciales y profesionales”, dice en su página web la Obra Social de los metalúrgicos que tras la crisis del 2001 empezó a estar gerenciada por los hermanos Olmos, Raúl y Alejandro.

Un grupo empresario que maneja medios (Crónica TV, Diario Crónica, Diario BAE Negocios, Revista 23, entre otros), salud privada (BASA Salud y Droguería Sudlatin, entre otras) y seguros (Evolución seguros). Eso sí, también tiene “responsabilidad social empresaria”.

Los Olmos tienen un modus operandi de comprar empresas en crisis para despedir al personal más antiguo y organizado, para luego avanzar en la flexibilización laboral. Lo hicieron en el diario Crónica hace una década y en el Centro Gallego hace un año. Incluyendo apriete con patotas par quebrar la resistencia obrera.

“Piraña”

Tiene 42 años, vive en William Morris y tiene dos hijos de 10 y 15. Desde el 2005 trabaja en Envases Del Plata. En 2017 se hizo transplante de médula, pero no siguió con las “drogas de mantenimiento” porque en la Obra Social no se lo recetaron. Puede ser la causa de esta recaída, según los médicos que ahora lo atienden el el hospital público El Cruce. Lo cierto es que es una enfermedad crónica, cuya medicación es muy cara, sin la cual el peligro de muerte es muy alto.

Piraña tiene un optimismo, propio de un militante preocupado por vivir de acuerdo a sus convicciones. “El video pegó fuerte en la base”, cuenta a Gráfica. Explica que tomó su enfermadad como una lucha colectiva: “hice las cosas como un compañero de fábrica más, sin pedir favores a la dirigencia“.

Sindicalismo empresario o movimiento obrero

La alianza de grandes empresarios con gremialistas tuvo su punto más alto en la década de 1990. Muchos dirigentes de ese entonces siguen al frente de sus sindicatos. Pero el 2001 marcó un punto de inflexión para toda una camada de militancia que hoy apuesta al recambio generacional.

En una entrevista del 22 de mayo pasado, Piraña reflexionaba: “En una fábrica cuando un delegado tiene que tomar una decisión importante no la toma solo, convoca a sus compañeros a una asamblea y se debate. Para que una línea política haga carne tiene que ser debatida por la base. Y creo que está faltando eso en la política popular de Argentina. Falta democratizar la participación popular. yo confío plenamente en nuestros compañeros, en los trabajadores, en los desocupados. Ahí está la cantera para hacer el cambio real”.



Dejá tu comentario