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Ulloa salvó al Leicester tras un arbitraje escandaloso

El juez Jon Moss echó injustamente al goleador Vardy y le regaló un penal a West Ham, que lo dio vuelta. Pero en el descuento cobró otro para el local, y el argentino puso el 2-2.

El argentino Leonardo Ulloa salvó este domingo a Leicester de una derrota que hubiera sido injusta y escandalosa, al darle de penal el empate 2-2 ante West Ham United en el descuento de un partido dominado por los horrores arbitrales que a punto estuvieron de convertir el sueño de los Foxes en una pesadilla.

El árbitro Jon Moss fue el gran protagonista del encuentro en el King Power Stadium, que vivió otra jornada épica en el camino de su equipo hacia la gloria en la Premier League. El partido, en sus carries normales, se presentaba como otro paso de Leicester hacia el título, luchado y sufrido, pero firme. Hasta que a los 10 minutos del segundo tiempo el juez decidió empezar su show.

Fue cuando le mostró a Jamie Vardy la roja que dejó a su equipo con uno menos para sufrir hasta el final. La expulsión, discutuble, llegó por una jugada en la que el delantero cayó en el área rival, que bien pudo haber signficado un penal para Leicester aunque el árbitro interpretó como simulación. El goleador había visto la primera amarilla a los 28 minutos del primer tiempo, poco después de abrir el marcador con su gol 22 en la Premier.

Tras la expulsión, nada fue igual. El DT Claudio Ranieri mandó a la cancha a Ulloa por el japonés Shinji Okazaki, y el argentino terminaría siendo el héroe salvador a la postre. Pero para eso faltaba mucho.

Leicester sufría y aguantaba. Hasta que Moss decidió regalarle un penal insólito a West Ham, por una supuesta infracción en un corner. Andy Carroll aprovechó el regalo. Iban 83 minutos y el local, presa de la bronca por la segunda injusticia, se descontroló en defensa. Y así fue como a los 86 Aaron Creswell dio vuelta el marcador con un golazo.

Las lágrimas de bronca e impotencia comenzaron a caer en los rostros de los hinchas en el King Power Stadium. Era una pesadilla a plena luz del día. Pero Moss desmotró que lo suyo no fue animosidad para con Leicester, sino simplemente mal desempeño, y le otorgó a los Foxes un dudoso penal en el quinto minuto de descuento.

El gol de Ulloa sirvió para expulsar la bronca en un grito agónico, para sentir algo de alivio. Pero no ocultó que Leicester, que podría haberle sacado 10 puntos a su escolta Tottenham antes de que los Spurs jueguen este lunes su partido por la fecha 34, pueden ver reducida su ventaja a 5 unidades de cara a las últimas cuatro jornadas.

Crónica y síntesis



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