En lo que puede leerse como una secuela de su postal recorriendo con botas y gesto adusto calles embarradas de la provincia de Buenos Aires en tiempos de su candidatura a gobernadora, María Eugenia Vidal volvió a apelar a los golpes bajos en año electoral y a menos de un mes de las PASO.
En lo que parecía ser una ocasional visita de campaña a las instalaciones del SAME, la primera candidata a diputada nacional por CABA en las listas larretistas de la Alianza Juntos, utilizó un hecho como la tragedia de Once nada menos que junto al titular del Sistema de Atención Médica de Emergencias, Alberto Crescenti.
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"Beto me regaló el chaleco que usó en la Tragedia de Once. Muchos héroes no llevan capa", escribió Vidal en Twitter, donde calificó como "amigo" a Crescenti. Además, acompañó con un video en el que ambos actúan para la cámara la entrega del chaleco.
"No, no sabés... Me voy a poner a llorar", dice Vidal mientras mira el chaleco que prolijamente Crescenti le entrega mirando a cámara.
La manipulación del dolor de más de 50 familias de quienes perdieron la vida en ese hecho ocurrido en 2012 generó amplio rechazo en redes sociales, donde se le remarcó a María Eugenia Vidal lo morboso de la situación.
Además, le remarcaron el incendio ocurrido en Iron Mountain en 2014 (cuando ejercía como vicejefa de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires), donde murieron 10 personas en un hecho que aún hoy sigue teñido de sospechas.
