"¡No se banca más!", bramaban los Seru Giran a fines de los ´70s en "La grasa de las capitales". Hoy tampoco se banca más y el grito viene desde lo más abajo de la escala social hasta el sector pyme, cuyos directivos están lejos de medir lo que consumen en sus casas, pero sí ven como el ajuste los lleva a recortar empleos de a miles. Y lo reconocen ellos, que acaban de afirmar que entre enero y mayo echaron a unas 60 mil pesonas.
El presidente de Industriales Pymes Argentinos (IPA), Daniel Rosato. señaló este martes que desde el 1 de enero se registraron al menos 60 mil despidos y aseguró que hay un freno en la productividad porque “no hay demanda”.
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En ese marco, Rosato puntualizó que en las últimas tres semanas crecieron las suspensiones en las pequeñas y medianas empresas.
El industrial apuntó también la situación de las industrias metalúrgicas y señaló que en ese sector hay un freno en la productividad porque “no hay demanda”. Acotó que “mucho equipamiento” se está comprando en el exterior y que "hoy una pyme está trabajando con el stock y sus reservas”.
En declaraciones a la señal TN, a días de que las empresas tengan que liquidar el medio aguinaldo, Rosato remarcó que la mayoría utilizarán “ahorros” para abonarlo. “La problemática de no poder afrontar los pagos no va a superar el 10% de las pymes”, aunque adelantó que el escenario será peor en diciembre.
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Sin cepo, peor
Sobre la promesa de Javier Milei respecto del posible fin del cepo cambiario, el titular de IPA afirmó que en ese caso la situación de las pymes seria más grave porque la Argentina no puede competir porque sus costos son muy caros.
“La apertura de cepo para importar productos terminados va a agravar la situación y generar mayor desempleo. La gente no va tener para comprar ni para lo barato”, explicó.
