"Fue un hecho de inseguridad", enfatizó la hija del colectivero asesinado, en la puerta del sitio donde velaban los restos de su padre. En la misma línea, negó que hubiese sido "un ajuste de cuentas", como había señalado el ministro de Seguridad bonaerense Sergio Berni.
Daniel Barrientos era chofer de la línea 620, que recorre el partido de La Matanza. Tenía 65 años y estaba a un mes de jubilarse. Sus compañeros de trabajo dijeron considerarlo "un hombre ejemplar, hasta venía a trabajar enfermo". Falleció por un tiro en el pecho, cuando comenzaba el servicio a las 4.30 de la madrugada del lunes. Un grupo de delincuentes se subió a la unidad y comenzó un tiroteo con un policía de la Ciudad que ya se encontraba allí. Barrientos fue víctima fatal del tiroteo. El hecho recuerda a otro asesinato similar en 2018, donde murió el chofer Leandro Alcaraz.
Su hija consideró esta mañana que lo sucedido con su padre "fue un hecho de inseguridad" y que "lo mataron como si nada".
"Fui parte de las fuerzas de provincia (de Buenos Aires), sé como es el trabajo en la calle. Me molestó que Berni haya dicho que fue un ajuste de cuentas. Fue un hecho de inseguridad", dijo a la prensa Andrea Barrientos, en la puerta de la sala donde velaban los restos de su padre.
Berni tampoco tuvo un buen día este lunes: fue acorralado y golpeado por los choferes que, durante la jornada, hicieron paro y protesta para reclamar mejoras en la inseguridad que afrontan día tras día al salir a trabajar y, también, como pasajeros.
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"Lo mataron como si nada", añadió, y aseguró que el partido de La Matanza "es bastante jodida" y una zona "conflictiva".
"Ojalá que esta inseguridad una vez se acabe, todos vivimos con miedo", sostuvo. Eso mismo reclaman los compañeros de la víctima, que denuncian, a su vez, corrupción interna en la UTA (Unión Tranviarios Automotor).
Por último, Andrea recordó a su padre como "una persona carismática, que siempre tiraba un chiste", y pidió que se lo recuerde como "un hombre alegre".
"Pido que se haga Justicia, que encuentren a los que estuvieron implicados en el asesinado de mi papá y que paguen las consecuencias como debe ser, por eso existe una ley", concluyó.
Por su parte, Isabel, hermana del colectivero, también presente en el velatorio, aseguró que su hermano, cuando hablaba de su trabajo, siempre le decía que "iba zafando" de los hechos de inseguridad.
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